La conductividad térmica es la medida de la transferencia de calor dada en K= (W/mK o Btu.in/ft².hr.°F) esta una de las más importantes propiedades de un material aislante y debe ser considerada siempre en primer lugar durante la selección del producto.
El aumento de la conductividad térmica es tanto más rápido cuanto menor es la densidad y más alta es la temperatura de operación.
La conductividad térmica (K) varía con la temperatura, estructura de fibra, distribución y orientación de las fibras, siendo en total producto de cuatro componentes:
- Conductividad térmica del aire estático en las cavidades entre las fibras.
- Radiación.
- Conductividad térmica a través de las fibras.
- Convección
La principal relación entre esos componentes a una temperatura dada se muestra en el siguiente gráfico:
Hay una relación muy estrecha entre la densidad de un material aislante y su coeficiente de conductividad térmica (K).
Si la densidad de los materiales es baja, las celdas de aire son de gran tamaño, lo que implica un coeficiente de conductividad relativamente alto, pero a medida que se aumenta la densidad, se reduce el tamaño de las cámaras de aire hasta llegar a la situación ideal, momento en que se alcanza el valor mínimo del coeficiente de conductividad térmica (K).
Por otro lado la resistencia al flujo de aire es un indicador de la calidad del aislamiento con respecto a las propiedades térmicas y acústicas. El aire en reposo (o mejor, algunos gases) es el elemento que presenta el mejor poder aislante, por esta razón, los materiales aislantes contienen numerosas celdas de aire, aprisionadas entre los elementos sólidos que los constituyen.
Por otro lado la resistencia al flujo de aire es un indicador de la calidad del aislamiento con respecto a las propiedades térmicas y acústicas. El aire en reposo (o mejor, algunos gases) es el elemento que presenta el mejor poder aislante, por esta razón, los materiales aislantes contienen numerosas celdas de aire, aprisionadas entre los elementos sólidos que los constituyen.
Contrariamente a la idea tan extendida de que una densidad elevada va en detrimento del poder aislante térmico de los materiales, se debe precisar que cuanto mayor sea la densidad menor será el coeficiente de conductividad.
La Lana Mineral de Roca al poseer mayor densidad y más cuerpo por unidad de área, utiliza mejor la propiedad del aire en reposo pues contiene miles de millones de pequeñas celdas de aire atrapadas entre sus fibras.
Entre mas espacios o celdas de aire y entre más pequeños sean, más eficiente es el aislamiento.
Los productos de baja densidad tienen una menor resistencia al flujo de aire, por lo tanto, hay mayor convección del aire dentro de las celdas incrementando las pérdidas de calor y la temperatura superficial.
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